La prestigiosa Journal of Biological Chemistry ha publicado recientemente el trabajo de revisión y hipótesis sobre el SARS-CoV-2 del investigador Pablo Fuentes Prior, coordinador del Grupo de investigación de Bases Moleculares de las Enfermedades, del Instituto de Investigación de Sant Pau -IIB Sant Pau.
La pandemia de Covid-19 ya ha causado más de un millón de muertes en todo el mundo, y este número de muertos será mucho mayor antes de que haya tratamientos efectivos y vacunas disponibles. El agente causante de la enfermedad, el coronavirus SARS-CoV-2, muestra importantes similitudes con el SARS-CoV-1 previamente surgido, pero también diferencias sorprendentes. En primer lugar, el SARS-CoV-2 posee una tasa de transmisión e infectividad significativamente más alta que el SARS-CoV-1 y ha infectado en pocos meses más de 60 millones de personas. Además, el Covid-19 tiene un carácter sistémico, ya que además de los pulmones también afecta al corazón, el hígado y los riñones entre otros órganos de los pacientes, y provoca frecuentes complicaciones trombóticas y neurológicas. De hecho, el término «sepsis viral» ha sido recientemente acuñado por describir sus observaciones.
El trabajo «Priming of SARS-CoV-2 S protein by several membrane-bound serine proteinasa could explain enhanced viral infectivity and Systemic Covid-19 infection» del investigador Pablo Fuentes Prior es una revisión de la información actual sobre la estructura- función de la proteína espiga del virus y el proceso de fusión de membrana para proporcionar explicaciones plausibles para estas observaciones. La hipótesis formulada es que varias proteasas serina asociadas a la membrana (MASP), en colaboración o sustitución de TMPRSS2, contribuyen a activar la proteína espiga del SARS-CoV-2. Las concentraciones relativas del receptor de afección, ACE2, las MASP, sus inhibidores endógenos (los inhibidores transmembrana de tipo Kunitz, HAI-1 / SPINT1 y HAI-2 / SPINT2, así como las principales Serpina circulantes) determinarían la tasa de infección de las células huésped. La expresión exclusiva o predominante de las principales MASPs en órganos humanos específicos sugiere un papel directo de estas proteínas en, por ejemplo, la infección cardíaca y la lesión miocárdica, la disfunción hepática, el daño renal, así como las complicaciones neurológicas. Una consideración exhaustiva de estos factores podría tener un impacto positivo en el control de la actual pandemia de Covid-19.
